Fito preguntó al ser detenido: ¿Me van a extraditar?

Estados Unidos oficializó esta tarde del 8 de julio el pedido de extradición de José Adolfo Macías, alias Fito, ante la Corte Nacional de Justicia.  Minutos después de sus captura, Fito habló con los policías y militares que lo detuvieron el miércoles 25 de junio y precisamente lo primero que les preguntó es si secretaría su entrega a las autoridades de ese país. Esta alianza reproduce parte de la conversación que mantuvo el líder de Los Choneros. Nota actualizada a las 21:00.

Alianza Código Vidrio – Vistazo

No hubo arrepentimiento en las primeras palabras que pronunció José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, luego de su recaptura en un bunker, bajo una casa entre Manta y Montecristi, el pasado miércoles 25 de junio. Esta alianza accedió a la transcripción de los primeros diálogos, una vez que el narco salió del subsuelo de la lujosa vivienda, por temor de que las paredes lo sepultaran. La operación duró más de 13 horas.

“Bueno, una pregunta, una pregunta, ¿Me van a extraditar? Yo no soy traqueto, lo que yo  vendo es un kilo de creepy, un kilo de polvo. Con eso sobrevivo, ¿Todo el mundo lo sabe, no?”. Esto dijo a los uniformados que lo atraparon y recapturaron, según la reconstrucción del diálogo.

De las conversaciones iniciales se desprende que le preocupaba el tema de su extradición.

Este 8 de julio, 13 días después de su recaptura, Estados Unidos pidió formalmente la extradición de José Adolfo Macías, quien es requerido por la justicia de ese país por narcotráfico y otros delitos.

La solicitud llegó al presidente  de la Corte Nacional de Justicia, José Suing, este martes 8 de julio, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores. 

“El proceso de extradición pasiva se tramitará de conformidad con el ordenamiento jurídico ecuatoriano”, informó la Presidencia de la Corte en un comunicado. 

Según el artículo 199 del Código Orgánico de la Función Judicial, el Presidente de la Corte es la autoridad central competente en materia de extradición.

Esta misma tarde el Secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, conversó con la Canciller, Gabriela Sommerfeld, sobre los esfuerzos conjuntos para combatir la delincuencia transnacional en la región. Además elogió al gobierno por la exitosa captura de Fito y destacó la colaboración para promover la seguridad en todo el hemisferio.

Cuando fue detenido, Fito se refirió a la extradición en varias ocasiones, en el diálogo con los agentes que lo capturaron.

Además, minimizaba su rol como responsable de una organización de narcotráfico a gran escala.

En pericias de perfilamiento criminal que habían realizado expertos, cuando Fito estaba detenido, se reveló que no admite sus delitos.

“Lo que me gano la vida es en lo local”, se lo escucha decir, ante los interrogatorios de agentes y uniformados, policías y militares, que lo recapturaron luego de que él lograra permanecer prófugo durante 17 meses.

Fito se había atrincherado en el bunker de la lujosa mansión con paredes de mármol, piscina interior, gimnasio y área de juegos, en la provincia de Manabí.

Al ser recapturado, el miércoles 25 de junio, Fito explicó las razones de su huida. “Me fui de la prisión porque me iban a matar el día que me iba, que me iban a trasladar. Foto cortesía FF.AA.

De sus primeras intervenciones se desprende su interés en conocer sobre el proceso de extradición. Pregunta sobre los plazos y los tiempos. Y queda en evidencia su voluntad de negociar con agencias del extranjero.

Agentes de inteligencia consultados por esta alianza coincidieron que Fito pedía entregarse en un tercer país, para ser extraditado hacia Estados Unidos. Además, su temor era llegar a la cárcel de El Salvador.

A inicios de enero de 2024, Fito huyó de la prisión regional de Guayaquil, ante su inminente traslado a la cárcel de La Roca.

Al ser recapturado, el miércoles 25 de junio, Fito explicó las razones de su huida. “Me fui de la prisión porque me iban a matar el día que me iba, que me iban a trasladar. Yo ya estaba para mi 40 por ciento, no tenía porqué fugarme, ese mismo año tenía que salir. Me fugué por ganar un día más de vida; por lo menos sería factible ingresar a un cuartel”, afirmó, poco después de ser aprehendido.

Un extenso reportaje publicado por The Washington Post sobre la captura de Fito revela que él narco mantuvo en paralelo varias líneas de negociación con distintos actores, no solo del Estado ecuatoriano sino de agencias extranjeras.

Fito no se arrepentía

“He tratado de cambiar la vida a mucha gente, que sí lo he hecho. Sí, lo he hecho entonces, toda la vida, a mucha gente. ¿A cambio de qué? De nada, de nada. Me siento bien, de tantos errores que he cometido. Me siento bien”.

“Es que a mí me conviene salir. Dios es grande, nada más, o sea… Yo estoy dando un tratado con ellos, quiero entregar con ellos, quiero que entienda. ¿Qué eso demora? ¿Cómo está? Todo era leyes”.

Mencionaba la necesidad de proteger a su padre, a su hija y a su familia. Así, queda en evidencia que mantenía comunicaciones, con distintos interlocutores.

Esta alianza conoció que a inicios de marzo de 2025 hubo una operación para detenerlo en una zona rural de Manabí, llamada Junín. Ese intento fue fallido.

En su alocución destacaba que su fuga, en 2024, no causó violencia. “Por eso le dijo, no soy como lo pintan, ya me fugué sin hacer daño a nadie. No tengo nada que ver con las muertes”.

Fito guarda prisión en la Roca, en Guayaquil. Foto de archivo

El capo ya se fugó de La Roca en 2013

En febrero de 2013 un grupo de detenidos se fugó de la cárcel de La Roca, usando el río Daule como vía de escape. Entre ellos se encontraba Fito.

Tres meses después, en mayo de ese año, el ministerio de Gobierno de la época anunciaba que Fito había sido recapturado en el escondite bajo la vivienda de un familiar suyo en El Palmar (Manta). En la casa de enfrente, también en un sitio subterráneo, estaba escondido su hermano Ronal Xavier Macías Villamar, alias Javi.

Antes de la captura, la madre de los hermanos Macías Villamar había intentado negociar las condiciones para que ellos se entregaran. “Al gobierno de la Revolución Ciudadana no se le puede chantajear ni manipular. Desde el inicio fuimos tajantes al afirmar que no íbamos a aceptar las condiciones de dos peligrosos delincuentes y les advertimos que haríamos hasta lo imposible por recapturarlos”, dijo en esa ocasión el entonces ministro de Gobierno, Javier Córdova.

En enero de 2024, al huir de la cárcel regional de Guayaquil, Fito evadía La Roca. Hoy, espera en ese entro de privación de libertad su inminente extradición hacia Estados Unidos.